Catamarca sierras y valles de encanto
La provincia se sitúa sobre la Cordillera de los Andes a 1150 kilómetros de Buenos Aires, constituyendo un lugar ideal para quienes desean realizar turismo aventura gracias a que la mayoría de su territorio es montañoso. Debido a que albergó a culturas indígenas muy antiguas, posee grandes recintos arqueológicos ideales para sumar un poco de historia a las vacaciones.
Su capital, San Fernando del Valle de Catamarca, está rodeada de sierras y valles donde se crearon villas veraniegas con un clima templado pero húmedo. La celebración más grande de la provincia es la Fiesta Nacional del Poncho que se realiza en julio y consiste en espectáculos, show artísticos y folclóricos, demostración de gastronomía del lugar, venta de ponchos y artesanías.
San Fernando del Valle
La capital conserva sus techos rojos coloniales y presenta cuatro avenidas principales. Es un centro religioso destacado por eventos como la peregrinación a la Virgen del Valle, además de poseer reconocidas iglesias. Las ofertas de turismo aventura son variadas y se relacionan mayormente con actividades de montaña.
Cuesta del Portezuelo
Conecta la capital con otras localidades y el camino posee 17 kilómetros de largo. Está salpicado por miradores que permiten apreciar espectaculares vistas panorámicas, un recorrido que vale la pena para admirar los paisajes desde las alturas.
Las Pirquitas
Un lugar tranquilo donde las fachadas de ladrillos a la vista inundan el paisaje. Se pueden realizar diversos deportes náuticos, pescar y disfrutar de una caminata por la costa ya que el lago que bordea la villa abarca 250 hectáreas. Es una localidad turística de reciente formación, pues nació en 1960 con la construcción de su famoso dique.
El Rodeo
Se encuentra en la desembocadura de las Sierras de Ambato y se ofrecen casas, campings y cabañas para pasar un fin de semana. Sus calles poseen nombres de flores y árboles, concordando con el clima veraniego que se vive allí. Cuenta con varios servicios como restaurantes, almacenes o farmacias.
Fiambalá
Está situada en el camino que cruza a Chile por el paso de San Francisco y presenta antiguas edificaciones coloniales. Sus termas suman catorce piletones naturales en la cima de la montaña cuyas temperaturas van desde los 30ºC en la zona inferior hasta los 50º cuando se llega a la superficie.
Antofagasta de la Sierra
Rodeada de cerros, lagunas y volcanes, se halla en la puna, que es una región altiplánica en el centro de la Cordillera de los Andes. Por esta razón su clima es frío, con temperaturas por debajo de los 0ºC. Ovejas, cabras y llamas son algunos de los animales que habitan allí.
Tinogasta
En lengua indígena pazioca significa “reunión de pueblos” y constituye una ciudad especial para el agroturismo debido a la cantidad de árboles frutales, olivares, chacras, alfalfares y viñedos que ofrece. Además, se presta para el turismo aventura por su cantidad de accidentes geográficos.
Villa Vil
Situada en el departamento de Belén, los habitantes de la pequeña villa se dedican a la esquila de vicuñas silvestres, con un protocolo minucioso para no estresar al animal que está en peligro de extinción. También se pueden apreciar flamencos y otras especies de la región de la puna.
